
Huelga en la fábrica de Automóviles Honda en China, los huelguistas están vestidos de blanco y son adolescentes reclutados de sus centros de estudio, los de gorra son los sindicalistas del Partido Comunista Chino
Tanto Cuba como Venezuela explícitamente expresan que lo que hacen es de acuerdo al marxismo.
Algunos críticos dicen que fue mal aplicado el marxismo, la crítica mas común es que no había el desarrollo capitalista suficiente y entonces se presenta una dictadura de «la burocracia». En el caso de Cuba, la dirección del Estado, llamó como asesores a los más granado de la intelectualidad marxista, con lo cual exploró todas las potencialidades de esta representación de la realidad para generar una sociedad encaminada al comunismo o el mejor socialismo posible. Pero con estas premisas tenemos ese estado deplorable de la vida en el país. En el caso de Venezuela tenemos esa disminución acelerada de la condición de vida de los venezolanos.
Pero ¿dónde está la falla?.
En cualquier representación de la teoría de Marx, inmediatamente después de «la dictadura del proletariado», el sistema sigue rigiéndose por la ley del valor de cambio «capitalista». Los marxistas en el poder, conviven con esta ley, con sus buenos deseos y propósitos de ir caminando hacia el hombre nuevo.
Una característica de esta ley tal como es formulada por Marx, es que representa una sociedad esclavista y no la base de “el capital”.
Según esta ley que se debate el tomo 1 de “El Capital” de C. Marx, los obreros en el sistema mercantil, su pago se limita a lo que necesitan para comer y el valor de la mercancia no depende de los pagado al trabajador. Una sociedad esclavista que no relaciona lo pagado al trabajador con el valor creado en el proceso de trabajo. C. Marx argumenta en favor de esta conceptualización y muy amigo de formular leyes, establece:
(Ley)“Primera: la jornada de trabajo de magnitud dada se representa siempre en el mismo producto de valor, por más que varíe la productividad del trabajo, y con ella [631] masa de productos y por tanto el precio de la mercancía singular.”(El capital Capitulo XV, Cambio de magnitudes en el precio de la fuerza de trabajo y en el plusvalor)
Para C. Marx, si se aumenta la productividad no se aumenta el valor y esto lo establece como una ley. Esto que se presenta en el marxismo como una ley científica, ha traído las peores consecuencias, cuando estos chapuceros se encargan de la dirección de la economía de un país. No es de esperar que quien se ha tragado esta “ley” promueva una situación donde mejore la producción. En su mente la forma de mejorar la producción de «valor» es aumentar los horarios de trabajo. También como amargamente ha comprobado el pueblo cubano, enviando los profesionales al trabajo bruto, es decir aumentar el valor mediante el aumento de la cantidad de trabajo. C. Marx dice que si varia la productividad, la jornada siempre se representa en el mismo producto de valor.
Pero si varia la productividad, esta representa más tiempo de trabajo, que por ejemplo en otra unidad de producción, y por lo tanto más valor. El cambio de productividad se puede dar por que se entrene a los trabajadores, con lo cual se está aplicando una fuerza de trabajo superior. En cualquier caso la ley de Marx es contradictoria en si misma puesto que dice que el valor se mantiene aunque aumente el precio del producto. Si Sabemos que el precio es el valor expresado en dinero, lo que no cambia por el hecho de referirse Marx a la mercancía individual. Cuando por ejemplo se aplica un criterio generalizado de mejora en todas las empresas, habrá aumentado el valor total de la producción, si se compara con un patrón de equivalente.
La conclusión que resulta de las premisas es que el valor aumenta con el aumento de la productividad y no como dice Marx.
Adam Smith
«En todas has grandes fabricas el trabajo de inspección suele encomendarse a cierta persona que haga de capataz, sobrestante, los salarlos que a esa persona se den son los que verdaderamente expresan el valor del trabajo que llaman de inspección, y aunque cuando se señala que esos salarios se atiende regularmente, no solo a su trabajo y pericia, sino a la confianza que en él se deposita, nunca están en proporción regular con el capital cuyo manejo se les ha confiado y el dueño del fondo, aunque de este modo queda descargado de aquel trabajo, espera no obstante que sus ganancias se conmensuren a su caudal. Por tanto en el precio de las mercaderías las ganancias correspondientes al capital, o los productos del fondo, constituyen un principio de valor enteramente ,distinto de los salarios del trabajo» La riqueza de las naciones Tomo I», A- Smith. pag 83. Valladolid, 1794
Smith describe el precio de las mercancías no dependiendo de la acción del «capataz» o del que hace labores «de inspección» y recalca que el precio de las mercancías no depende de los salarios.
Este concepto es aceptado por Marx y lo expresa de cien maneras diferentes sin discutirlo. Otro es el concepto norteamericano que viene desde Benjamín Franklin, los CEO reciben en general un salario de entre el 2% y el 4% del capital encomendado y su monto en este momento está por 400 salarios mínimos, siendo de 30 salarios mínimos para los años 1950.
Esta afirmación, discutible en Smith, se transforma en un cangrejo cuando C. Marx la pasa a través de la «forma de la mercancía» y toda la insufrible complicación dialéctica hegeliana.
Entonces Fidel Castro y los sabios marxistas, mas iguales que los demás, consideran tabú pagarle mas a quien innova proporcional al retorno de su innovación.
Así el que innovó, ya le pierde interés y por supuesto los cuentapropistas, en el estado libre de la creación y el interés por el producto del trabajo, son sometidos a impuestos y cargas que le impidan disfrutar de su trabajo y la inventiva que Dios le dio.
Esta es la camisa de fuerza que han impuesto los marxistas al sistema productivo cubano y venezolano, en lo que ellos creen que es el “período de transición” o “socialismo”. Lo más grave es que para los marxistas el que reclame el producto de su trabajo es uno “que tiene desviaciones pequeño burguesas”. Con estos prejuicios quizá la única forma de que se produzca algo es hacer lo que hacen los marxistas chinos, es decir entregan la mano de obra barata a las empresas capitalistas de occidente y ellos se evitan las desviaciones burguesas o quien sabe que piensan.
Lo más perturbador de todo esto es la imposibilidad de los marxistas de reflexionar o entender esta realidad. Vemos que el socialismo de Europa oriental y Rusia se cayó sin crítica explicita, hubo una implosión. Por ejemplo, Gorbachov reveló los crímenes de Lenin, pero poco se lograron aclarar de los defectos del marxismo.
Debo aclarar que lo que llamo capitalista es, continuando las tesis de Braudel, el empresario que obtiene sus ganancias fuera del mercado y que en general para ello se asocia con el poder del Estado (2). Como ejemplo, Inglaterra y sus colonias, los comerciantes que controlaron el comercio de Latinoamérica en el siglo XIX y los que hoy lo controlan con el apoyo de Estados Unidos. Y en este caso capitalista, aunque de segunda categoría, es Fidel Castro y toda su claque.
Las etapas históricas de Marx
Las etapas de Marx son una fantasía. Hasta el siglo XIX la esclavitud representó una parte mayoritaria de las ganancias de la clase política gobernante, es decir, la aristocracia inglesa. Había esclavos en Norteamérica, en Brasil, los hindúes y chinos también estaban esclavizados al servicio de esta aristocracia. Como volumen de ganancias, debe enterarse que el PIB de la India en esos años era mayor que el de Inglaterra. Marx como buen muchacho filósofo, se plegó a las narraciones fantásticas de Adam Smith y David Ricardo, que hablaban del triunfo del capitalismo para lograr mercados, pero no decían nada de la superioridad productiva de la India antes el siglo XIX. Trabajo artesanal hubo entre los griegos en la época de Sócrates, como dice Jenofonte y en competencia con el trabajo esclavo (1).
El feudalismo fue una organización consciente de la humanidad, en unos casos basada en el cristianismo, para superar el capitalismo de la antigüedad, Siendo el capitalismo la obtención de beneficios basados en el desconocimiento del valor de las mercancías en mercados diferentes. El capitalismo guerrea para obtener esos beneficios.
Las clases de Marx nunca existieron, el ser humano, su ser siempre es correspondiente a un pueblo, una nación. Lo que se llama capitalismo corresponde al ser social del Estado que domina, en este caso Inglaterra y ahora los principales capitalistas de Estados Unidos dominantes en el gobierno de ese país. Las clases oprimidas son los países del tercer mundo y para salir de su estado, deben realizar su ser social nacional, con el objeto de superar el sistema capitalista.
Es decir no deben ser como la ideología de Hitler que quería cambiar al capitalismo inglés pero para poner al capitalismo alemán.
Si no fuera por la aberración marxista, Cuba y Fidel Castro representarían esa solución a los problemas del mundo, aunque hoy solo son otra clase política dominada o mayordomos del poder capitalista.
La explotacion del siglo XIX fue relatada por Engels en La situación de la clase obrera de Inglaterra en 1844, sin tomar en cuenta que la clase obrera depauperada en Inglaterra eran irlandeses, un subproducto del dominio militar. Tampoco, Engels no dice nada de que la mayor parte de la plusvalía de la clase dominante inglesa provenía de Asia.
(1)Jenofonte, «Recuerdos de Socrates * …», Editorial Gredos, pag 93, link: https://allaboutrousseau.files.wordpress.com/2015/11/socrates-recuerdos-de-sc3b3crates-econc3b3mico-banquete-apologc3ada-de-sc3b3crates-jenofonte.pdf
(2)Braudel, Ferdinand, «Dinamica del capitalismo»,Fondo de Cultura Ecomómica, pags 22 y sig, concepto de contramercado. link https://ia600105.us.archive.org/21/items/BraudelFernand.LaDinamicaDelCapitalismo/BraudelFernand.-LaDinamicaDelCapitalismo.pdf